Cuando preguntas a una persona cuál considera que es su mejor momento del día, te puede contestar un relativo abanico de opciones. Muchos consideran que es llegar a su casa y ver cómo sus hijos van corriendo a abrazarle. Después, tenemos los que despertarse al lado de la persona que más quieren de este mundo es su escenario perfecto. También los que comentan que la sensación de salir del gimnasio y notar el contraste de cansancio con energía revitalizante les llena plenamente. Otros, consideran poder pasear cada mañana por la orilla del mar como ese momento mágico, y así hasta un pequeño etcétera que podríamos resumir entre diez o doce aspectos comunes, ya se sabe, la originalidad no va con la masa común. Pero si que diría, que entre uno de estos aspectos, se encuentra cuando atraviesas la puerta del lavabo y te encierras entre esas cuatro paredes frías. Este momento, viviendo con o sin pareja, es único. Posteriormente, aposentas tu trasero en la taza del váter y a partir de aquí cada uno realiza las actividades que más le placen.
Dentro de estas actividades, y más allá de las que se están poniendo de moda como leer tus emails, sms o las noticias en tu dispositivo móvil, tienes muchas opciones. Recuerdo a un cliente que me comentaba hará unos ocho años, que cuando se sentaba era su mejor momento de inspiración y creatividad, y como nunca se acordaba de llevarse la libreta y el bolígrafo –por entonces no estaban tan difundidos los portátiles o los smartphones- decidió instalarse una pizarra en la pared a la altura aproximada de la cabeza. Digo yo que hubiera sido más fácil dejarse una libreta en el propio WC, incluso, si su problema era que siempre se la llevaba y no se acordaba de volverla a traer, que hiciera como ciertas cafeterías, que ponen unas barras de hierro a los diarios para evitar que sean robados, así seguro que le daría pereza llevársela de nuevo al salón.
Después tengo un amigo, que pasaba horas y horas leyendo. Como le gustaba ir alternando libros, empezó poniéndose un taburete para colocarlos encima, posteriormente acabó poniéndose una estantería dedicada exclusivamente a sus libros. Pero esto no acaba aquí, a la hora de comprarse un buen equipo de música, prefirió instalarlo en el WC en lugar del salón.
Pero más allá de todas estas actividades paralelas, existen algunas funciones básicas que nuestro organismo nos reclama, y claro está, para realizarlas, existe un componente esencial que es el papel higiénico.
Pues en este caso, ya se pueden ir preparando los dermatólogos para la avalancha de los pacientes con irritaciones que les vendrán, así como los laboratorios farmacéuticos para el incremento sustancial que tendrán en sus ventas de cremas, porque un informe demuestra que la merma calidad del papel higiénico va en aumento.
Según la revista Chemical & Engineering News (C&EN), la crisis de la prensa de papel repercute en el mercado del papel higiénico. Dicho de otro modo, que se tiren menos periódicos, revistas y folios de oficina blancos al contenedor de reciclaje deja a los fabricantes de papel WC sin materia prima de calidad para hacer rollos lo suficientemente suaves y flexibles como para satisfacer al consumidor.
El artículo también comenta que las empresas del sector ya están buscando soluciones alternativas, como nuevas resinas y aditivos, para atajar el problema.
"El consumidor norteamericano está acostumbrado al papel higiénico bastante suave, pero con fibras recicladas sólo se puede conseguir un cierto grado de suavidad", lamenta Martin Wolf, de la empresa Seven Generation, dedicada a la venta de productos ecológicos para el hogar.
Por lo visto, el problema se origina en las veces que se recicla el papel, pues las fibras de celulosa que contiene se hacen cada vez más cortas, lo que impide que luego pueda convertirse en un producto lo suficientemente suave y a la vez resistente como para realizar un cometido higiénico.
Por supuesto, las empresas productoras podrían optar por volver a la materia prima original, al árbol, pero admiten inicialmente que les sale caro.
Debo admitir, que al leer la noticia me inquieté notablemente. ¿El mejor momento del día para muchos podría verse truncado por sutilizas del papel? Así que he pensado que es de vital importancia empezar a buscar vías de retorno para que las empresas existentes detrás de Scootex, Colhogar, Renova, etc… puedan obtener ingresos paralelos.
En primer lugar, aprovechar las elecciones, sean municipales, autonómicas o para la presidencia del gobierno, para hacer publicidad de los candidatos:
Dentro de estas actividades, y más allá de las que se están poniendo de moda como leer tus emails, sms o las noticias en tu dispositivo móvil, tienes muchas opciones. Recuerdo a un cliente que me comentaba hará unos ocho años, que cuando se sentaba era su mejor momento de inspiración y creatividad, y como nunca se acordaba de llevarse la libreta y el bolígrafo –por entonces no estaban tan difundidos los portátiles o los smartphones- decidió instalarse una pizarra en la pared a la altura aproximada de la cabeza. Digo yo que hubiera sido más fácil dejarse una libreta en el propio WC, incluso, si su problema era que siempre se la llevaba y no se acordaba de volverla a traer, que hiciera como ciertas cafeterías, que ponen unas barras de hierro a los diarios para evitar que sean robados, así seguro que le daría pereza llevársela de nuevo al salón.
Después tengo un amigo, que pasaba horas y horas leyendo. Como le gustaba ir alternando libros, empezó poniéndose un taburete para colocarlos encima, posteriormente acabó poniéndose una estantería dedicada exclusivamente a sus libros. Pero esto no acaba aquí, a la hora de comprarse un buen equipo de música, prefirió instalarlo en el WC en lugar del salón.
Pero más allá de todas estas actividades paralelas, existen algunas funciones básicas que nuestro organismo nos reclama, y claro está, para realizarlas, existe un componente esencial que es el papel higiénico.
Pues en este caso, ya se pueden ir preparando los dermatólogos para la avalancha de los pacientes con irritaciones que les vendrán, así como los laboratorios farmacéuticos para el incremento sustancial que tendrán en sus ventas de cremas, porque un informe demuestra que la merma calidad del papel higiénico va en aumento.
Según la revista Chemical & Engineering News (C&EN), la crisis de la prensa de papel repercute en el mercado del papel higiénico. Dicho de otro modo, que se tiren menos periódicos, revistas y folios de oficina blancos al contenedor de reciclaje deja a los fabricantes de papel WC sin materia prima de calidad para hacer rollos lo suficientemente suaves y flexibles como para satisfacer al consumidor.
El artículo también comenta que las empresas del sector ya están buscando soluciones alternativas, como nuevas resinas y aditivos, para atajar el problema.
"El consumidor norteamericano está acostumbrado al papel higiénico bastante suave, pero con fibras recicladas sólo se puede conseguir un cierto grado de suavidad", lamenta Martin Wolf, de la empresa Seven Generation, dedicada a la venta de productos ecológicos para el hogar.
Por lo visto, el problema se origina en las veces que se recicla el papel, pues las fibras de celulosa que contiene se hacen cada vez más cortas, lo que impide que luego pueda convertirse en un producto lo suficientemente suave y a la vez resistente como para realizar un cometido higiénico.
Por supuesto, las empresas productoras podrían optar por volver a la materia prima original, al árbol, pero admiten inicialmente que les sale caro.
Debo admitir, que al leer la noticia me inquieté notablemente. ¿El mejor momento del día para muchos podría verse truncado por sutilizas del papel? Así que he pensado que es de vital importancia empezar a buscar vías de retorno para que las empresas existentes detrás de Scootex, Colhogar, Renova, etc… puedan obtener ingresos paralelos.
En primer lugar, aprovechar las elecciones, sean municipales, autonómicas o para la presidencia del gobierno, para hacer publicidad de los candidatos:
Después, con el patrocinio de revistas dedicadas a los Sudokus, realizar el mismo ejercicio:
Como considero que estamos hablando de un tema de interés nacional y donde hay que vincular a todos los organismos públicos, el propio ejército, en su afán por conseguir alistamientos, pueda hacer uso con mensajes subliminales
O en su caso y con versión patriótica, aprovechando los éxitos de las selecciones, generar su versión con la bandera nacional tal y como hicieron los alemanes en su momento:
La propia prensa escrita, podría buscar ‘lectores’ para subscribirse y que sean afines a sus textos:
O como no, Apple, que destinara un 1% de sus ventas del ipod a la causa:
Y ya por último, de todos los escenarios, me decanto por el siguiente: entrar a trabajar en el género de las novelas escritas. Tenemos el antecedente realizado en Japón:
La idea ha sido de Koji Suzuki, el autor de la novela “The Ring”. Le han acompañado con la idea la compañía Banbix y la editorial Hayashi Paper. Al parecer, la novela que lleva por nombre “Drop“, está a punto de convertirse en un Best Seller, porque lleva más del 80.000 ejemplares vendidos. Su precio es bastante económico, cuesta 210 yenes y al cambio serían 1,60€.
El objetivo era ofrecer una novela que se pudiera leer en el cuarto de baño, en lo que al parecer, se trata de una costumbre muy arraigada entre los nipones. De hecho, la empresa Hayashi Paper, lleva cierto tiempo editando rollos de papel higiénico con impresiones literarias, como cómics de índole Manga o relacionado con temas educativos.
Finalmente, acordaron entre editorial y autor, crear una novela de terror que no tuviera más de dos mil palabras, que se pueda leer con rapidez y así poder estar entretenido durante el momento en el que los lectores pasan por el cuarto de baño. Según el autor, los cuartos de baño es un lugar perfecto que puede inspirar terror, son oscuros, sucios, fríos y húmedos y quizás, con una novela de terror entre las manos, pase por convertirse en una experiencia única y ante todo, distinta. Otro punto a favor de esta nueva forma de editar los libros la podemos apreciar en los puntos de venta donde encontrarlos. Así, en Japón se puede adquirir la novela “Drop” en los clásicos puntos de venta de libros, en todas las secciones de hogar de grandes almacenes y supermercados.
La historia narra un suceso ocurrido en un pequeño baño público en Japón, supongo que de aquí que hayan pensado en hacer la novela en papel higiénico. Ahora la pregunta que se estarán haciendo es ¿cómo se lee esto? ¿qué sucede si se nos cuela un invitado en casa y ‘arranca’ el desenlace?
El texto ocupa menos de 1metro, es decir, está escrita en unos 88cm. y se repite continuamente a lo largo de todo el rollo. Por lo tanto, a no ser que exista una indigestión y haga que uno supere los 88 cm al limpiarse, no debería pasar nada.
Me ha parecido muy divertido que le hayas dedicado tiempo a esta investigación. Sos un buen especialista. El trabajo no te salió "como el culo"
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